"" Hace mucho tiempo...un árbol plantamos los dos"

"" Hace mucho tiempo...un árbol plantamos los dos"

Plantamos un árbol común hace cuarenta años ... ¿ o más ...?,
previamente llevamos cinco años planeando que todo saliera bien
y un día que de tanto calor al árbol, nuestros sueños le dio,
vimos que una rama pequeña nacía y decidimos ... su plantación.

Lo plantamos con cariño y de abono le dimos sueños y amor
y así, poco a poco, tres ramas brotaron del árbol que nuestras manos plantó,
luchamos contra sus plagas... los fríos de la noche ... el calor del Sol
pero el abono parecía insuficiente para que floreciera allí ... nuestra ilusión.

Una plaga tras otra nos fueron quemando las fuerzas ... alguien
sin nosotros saberlo, infectaba aquel árbol que tantos sueños nos dio,
y con el tiempo comprendimos que nuestro árbol se debilitaba
con la simple mirada que el Mal, nuestra vida siempre envenenó.

Pero tres ramas sobrevivieron y ahora ... árboles propios son,
duras en sus nuevas tierras, pero con leves sustancias que las plagas le dio,
nunca aquel árbol llegó a ser robusto de sueños y tampoco de amor
pero nuestro destino estaba marcado y no pudimos darle más calor.

Ahora es un pequeño tronco que durante tres años... se durmió
pero en su sabía que aún queda con vida con poca fuerza e ilusión,
late misteriosamente el intento, por el recuerdo de tanta lucha y amor,
de no dejar que se seque, aunque las fuerzas ya no son las que el árbol plantó.

Tal vez... si lo intentamos... si recordamos toda la ilusión
que pusimos cuando aquel árbol, en nuestras manos creció,
podemos evitar que la sabia que por sus entrañas queda
sea sobretodo respeto y unida al árbol.... nunca nos diga ... adiós.

Pero cuando el frío llega al invierno del caminar por la vida
uno no puede olvidar con muchísimo odio y dolor,
lo bello que hubiese crecido aquel árbol y las ramas que dio...
que por mucho que quiera olvidarlo ... mi dolor...solo lo sé yo.

Fueron tantos sueños segados  de ilusión, que algo quedó grabado
y de ese algo..una pequeña vela encendida allí...en su interior,
que nunca el Mal apagar logró... brilla mansa...tenua...pero viva
que ilumina el sendero de nuestro invierno, por donde...aún caminamos...los dos.